Con el frio que hace, no os voy a invitar a preparar un cocktail, con su hielo, bien fresquito, hoy vamos a hacernos un buen café irlandés.
Necesitaremos: Hacer un buen café, azúcar moreno, whisky, azúcar y nata para montar.
1- Con la ayuda de la batidora y en apenas un minuto, monta la nata, previamente añádele unos 50 gramos de azúcar por cada 200 ml de nata (unas 4 cucharadas soperas)
2- Añádele el azúcar moreno al whisky (la cantidad, al gusto), caliéntalo con el vaporizador de la cafetera o, en su defecto, unos segundos al microondas, flambea con precaución y remueve a la vez.
3- Con el café recién hecho, vamos poniendo en la o en las copas por este orden , primero la mezcla con el whisky, después añades, con la ayuda de una cuchara, de forma lenta por las paredes de la copa el café. Intentaremos con esto que ambos ingredientes no se mezclen. Añades después la nata y espolvoreas una pizca de café molido por encima.
La recomendación es beberlo sin mezclar en un principio, es decir, que en cada sorbo tomemos un poquito de los tres ingredientes.